¿Qué es LIBERTAD? un concepto, una vivencia, un estado. Algo que he aprendido en mi vida, es que la libertad no tiene que ver con una condición puntual pero SI, con un sentimiento y estado mental.
He escuchado a personas que se encuentran detenidos y cumpliendo condena por algún error cometido y manifiestan sentirse en libertad. La libertad es un estado mental, es sentir que no hay condiciones para tomar tus decisiones, creo que el momento en que tus decisiones se encuentren basadas o apoyadas en hechos puntuales, estás, sin darte cuenta, experimentando una cárcel mental. Algo que vivo en mis sesiones de coaching con adolescentes por experiencias que viven. Creo fielmente que esta es la mayor causa de experimentar una vida sin libertad hoy en día.
Cuando era niño crecí gran parte de mi infancia con mis abuelos, mis padres pasaban por momentos difíciles en su relación y para no experimentar ese proceso, vivía con mis abuelos, sin embargo en mi mente construía pensamientos de culpabilidad que sin darme cuenta se convirtieron en mi verdad, yo crecí con un sentimiento de no ser importante en la vida, sumado a mis dificultades de aprendizaje de las que les he hablado en otros escritos y las palabras expresadas por mis maestros que no me ayudaban para nada.
Estos hechos puntuales, a los que llamo las “estaciones de la vida”, crearon un sentimiento de inferioridad
en mí, lo único que tenía era mis inventos que utilizaba para llamar la atención a los demás, algo que quería SER para ser visible en mi mundo, aparentemente invisible, de aquí mi fascinación por los súper heroes porque en ellos se muestran poderes que los hacen ser reconocidos, tema que anhelaba, soñaba y deseaba. Les comparto esta realidad porque esto trajo en mí un sentimiento de falta de libertad, por supuesto, no tenía súper poderes solo era un niño con sueños. Vivía pensando que hacer para ser aceptado por los demás, así que en muchos casos sobreactuaba para llamar la atención.
Esta presión que vivía en mí, es igual a la que hoy detecto en mis sesiones de coaching para adolescentes o cuando dicto una conferencia a los jóvenes.
Es un peso que se carga y que lo caracterizo como aquella mochila que uno lleva en el viaje de la vida, es como cuando uno toma un tren y tiene varias estaciones, donde personas suben, otras bajan y van construyendo tu historia, donde muchas veces en ese tránsito recibes cosas que quedas cargando, con pesos extras que no permiten la libertad, que de alguna manera se busca.
Algo que aprendí en este trayecto de vida, es que uno acepta voluntariamente cargar con pesos innecesarios, pero claro, al querer ser reconocido y aceptado condicionaba mis decisiones aunque esto significaba pagar un precio por ello. El precio era la falta de libertad.
Mi historia cambio un día cuando conocí a Dios. Hablo de mi experiencia de vida, realmente yo tuve en el trayecto de las estaciones de mi vida muchas vivencias en diferentes religiones, un día les compartiré esa historia. Lo único que sé es que ese encuentro espiritual me permitió cambiar mi manera de pensar, y cambio toda mi vida. Pude reconocer que la vida no se trata de mí, sino de Él, de su voluntad, esto me dio libertad. El tratar de ser aceptado era mi mayor prisión pero al entender que por más que me esforzara y luchara, el mundo está lleno de seres humanos con historias iguales o más difíciles que la mía y que el ser aceptado como soy, no tiene que ver con los demás, si no conmigo mismo, esto me permitió olvidarme de mi, para vivir una nueva experiencia y me dio la libertad que tanto anhelaba.
Sé que muchos en las estaciones de la vida han tenido experiencias que les han permitido lograr esa vivencia, ese sentimiento de libertad que me parece maravilloso, pero hoy como coach, en mi trato con adolescentes, como especialista en coaching para jóvenes, los ayudo y acompaño en la construcción de pensamientos que les permitan conectarse con la emoción adecuada y puedan hallar la libertad que tanto buscan.